Noir et Blanc® nace a fuego lento en el municipio de Prats de Lluçanès de la mano de Clara Busoms acompañada de su familia trufera. Y es que, años después de adentrarse por los bosques de Prats de Lluçanès y de descubrir los secretos de la trufa con su pareja, Josep M., trufero des de los 16, en su etapa más adulta Clara Busoms crea Noir et Blanc® en el año 2018.
Noir et Blanc® es pasión y es dedicación. Es verano y es invierno. Es negro y es blanco. Es respecto a la naturaleza y es amor a la familia. Es la dualidad de Clara y de Josep M. Noir et Blanc® es sinceridad, sabiduría, conocimiento y respeto por el bosque y por la profesión. Los truferos, los de verdad, aman la trufa y una de sus máximas es respetar los ciclos de la naturaleza.
De ahí que Clara y su familia crean Noir et Blanc®. Una empresa con y sobre la trufa destinada a acercar la trufa a diferentes públicos a partir de la producción de trufa fresca y de la elaboración y comercialización de productos de gastronomía y belleza con trufa de recolección propia. Conocedores de la trufa y del mundo trufero, Noir et Blanc® abre y cierra el círculo: produce, recolecta y distribuye trufa.
La trufa es el hilo conductor de Noir et Blanc®. Una historia que habla de gastronomía y de belleza, pero también de familia, amor y compromiso. El objetivo de su fundadora es convertirse en un referente en el mundo de la trufa con transparencia, compromiso y fidelidad a la trufa y la familia trufera.
Cataluña es tierra de bosques y Prats de Lluçanès, donde nace Noir et Blanc®, es tierra de tradición de trufa. Este fruto del bosque es un tesoro que proviene de la tierra con cualidades gastronómicas excepcionales. Aporta intensidad, sabor y aroma a los platos, pero también resulta una gran aliada en cosmética. Las propiedades de la trufa son únicas y muy valoradas.
De las más de 70 especies de trufas que se conocen en el mundo, en Cataluña hay dos de las tres especies más preciadas. Tenemos trufa negra o de invierno (tuber melanosporum) y trufa blanca o de verano (tuber aestivum). Se trata de un privilegio que, desde hace tiempo, los territorios con trufas, como es el caso de El Lluçanès, ponen en valor.
El Lluçanès es un territorio rico en naturaleza y en cultura gastronómica. Y Noir et Blanc® es heredera de esta tradición, ya que surge en contacto con la tradición, la cocina y los bosques del Lluçanès.
La trufa negra o de invierno (tuber melanosporum) es una variedad de trufa que en Cataluña sólo se puede recolectar entre el 15 de noviembre y el 15 de marzo.
La trufa blanca o de verano (tuber aestivum) es una variedad de trufa que en Cataluña sólo se puede recolectar entre el 1 de mayo y el 15 de agosto.
Con más de 20 años de experiencia Noir et Blanc® tiene plantaciones propias en Cataluña (Osona) y en Aragón (Teruel) para poder garantizar el servicio a sus clientes durante el período de recolección de trufa fresca, pues la producción de trufa silvestre ha sufrido una importante disminución.
Noir et Blanc® es tierra, es equilibrio, es textura y es transformación. Noir et Blanc® es el poder de la trufa.