La tierra nos da una infinidad de productos y a Noir et Blanc® nos apasiona todo lo que la Naturaleza nos ofrece. Estamos a punto de dar la bienvenida al verano y los huertos se llenan de color. Las cebollas, las lechugas, las escarolas, los calabazas y las judías, entre otros darán color y vida a los huertos después de haber estado todo el invierno en reposo.
En Noir et Blanc® hay un color que nos gusta de forma especial. Es el rojo tomate. Este color ha sido fuente de inspiración de la línea Doucer, la línea de mermeladas con trufa de Noir et Blanc®. Y es por este motivo que en el mes de junio lo dedicamos a Douceur, nuestra línea más dulce y colorida.
El tomate forma parte de nuestra cultura gastronómica, aunque en Europa no lo conocimos hasta que no tuvimos contacto con América. Fue una etapa larga que hoy nos puede costar imaginar porque el tomate se ha transformado en un ingrediente imprescindible de nuestra dieta, la mediterránea.
Redondos, en forma de pera o de corazón, de color más rojizo o amarillento, más carnosos o más vacíos. Hoy tenemos una gran variedad de tomates y cada uno tiene unas cualidades y características.
En Noir et Blanc® seleccionamos los mejor tomates y de productores cercanos para elaborar nuestra mermelada. Y tal y como hacemos con nuestras trufas, los seleccionamos y los lavamos uno a uno para elaborar nuestros productos. En el caso de las mermeladas buscamos su punto exacto de cocción con el fin de encontrar un equilibrio sutil y delicado de la suma de los ingredientes que hacen que nuestra mermelada con trufa sea única y exclusiva.
¡Buena mermelada con trufa!
